La maca peruana es rica en proteínas, calcio (tiene más calcio que la leche animal, por ejemplo), hierro, ácidos grasos, omega 3 y 9, carbohidratos, fibra, magnesio, fósforo, vitaminas, zinc, entre otros nutrientes.
Sus poderes nutricionales son muchos. Además, ayuda a prevenir la diabetes, ya que disminuye la absorción de glucosa en la sangre. Tiene una cantidad significativa de Omega 3, que ayuda en el combate de las enfermedades cardiovasculares y en la regulación de los niveles de colesterol en el organismo.
El hierro, otro componente importante de la maca, previene la anemia.
La gran cantidad de calcio que contiene beneficia el fortalecimiento de los huesos, combatiendo la osteoporosis. Junto a todas estas propiedades, el tubérculo también actúa controlando los niveles hormonales, previniendo así una serie de enfermedades y minimizando el efecto de cambios, como la menopausia.
La raíz de maca es conocida por aumentar los niveles de energía, aumentar la resistencia y ayudar a equilibrar los estados de ánimo. Lo interesante es que no tiene los efectos secundarios de la cafeína y el que lo toma no pasa por estados de nerviosismo o agitación como en ocasiones sucede con otros estimulantes.
Esto probablemente tiene que ver con la habilidad de la maca para promover la salud suprarrenal, la cual está estrechamente ligada a los niveles diarios de energía.
También es una excelente fuente de proteínas, fibra dietética y vitamina B12, una vitamina relacionada con el suministro diario de energía del cuerpo y un estado de ánimo equilibrio.